Alemania expresó su malestar por la prohibición de la FIFA a usar los brazaletes «One Love» en protesta por la situación de los derechos humanos en Catar, en particular del colectivo LGTBI+. El once germano posó ante las cámaras tapándose la boca en su debut en el Mundial en una imagen que se hizo viral y que ponía de relieve el veto del organismo que rige el planeta fútbol a una reivindicación a la que se habían mostrado varias selecciones, sobre todo, europeas.
Los contertulios de un programa de televisión catarí se han burlado de la iniciativa de la selección germana y al mismo tiempo de su eliminación. Los presentes en el plató se han tapado la boca y han realizado el gesto de la despedida para Alemania durante unos segundos en los que han permanecido en silencio. La protesta de los germanos no sentó bien ni a la FIFA, ni a la organización y a tenor de la actitud de los participantes en el espacio televisivo tampoco en el país anfitrión, cuya política sobre los derechos de los homosexuales ha sido muy criticada.