El sindicato considera que el Pacte per la Sostenibilitat sufre «parálisis por el análisis» y exige al Govern que convoque de manera urgente una mesa de Diálogo Social especifica para establecer “el marco conceptual y las medidas prioritarias para transformar el modelo económico y social de Balears”, que es el objetivo del documento presentado este jueves por el secretario general de CCOO Illes Balears, José Luis García, y la responsable de Modelo Económico, empleo y transiciones del sindicato, Mariàngels Aguiló.
Una de las medidas destacadas es incrementar de forma temporal el Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) durante los meses de julio y agosto, cuando la presión turística alcanza su máximo. La propuesta fija una tasa de 15 euros por persona y día, que se aplicaría mientras no se reduzca la cifra anual de visitantes por debajo de los 14 o 15 millones. «No es una subida con afán recaudatorio, sino disuasorio, para que Balears lance al mundo un mensaje claro de que aquí no cabe más gente en temporada alta», señaló José Luís García.
El sindicato sostiene que esta medida no afectará a la llegada de turistas, ya que «los precios hoteleros han aumentado sin frenar la demanda» y recuerda que «otras 137 ciudades en Europa aplican tasas similares», según Aguiló. Proponen que los ingresos adicionales se destinen a mejoras en bienestar laboral, formación profesional y políticas de vivienda. «Prohens se comprometió a subir la ecotasa en octubre 2024 y es un tema de voluntad política. Esperamos que cumpla», subrayó García.
CCOO propone también una moratoria temporal en la concesión de nuevas plazas turísticas hasta que se alcance un consenso en la Mesa de Diálogo Social. El objetivo es frenar el crecimiento de visitantes en temporada alta y priorizar una oferta turística de mayor valor añadido, sustituyendo progresivamente la planta obsoleta. «Para reducir la masificación estival no basta con frenar la demanda; hay que actuar también sobre la oferta», advirtió García.
La sostenibilidad ambiental es otro eje clave. El documento plantea implementar planes de circularidad en los establecimientos turísticos y un calendario para reducir emisiones de gases de efecto invernadero, en línea con los objetivos del Acuerdo de París y la legislación autonómica. Entre otras medidas concretas destaca el aumento del consumo obligatorio de productos locales en hoteles y agroturismos, así como la reducción del número de cruceros que llegan a los puertos de las Islas.
Para reducir la huella de carbono y controlar la capacidad turística, CCOO propone renovar la flota de transporte público terrestre para que sea de emisiones cero, limitar la entrada de vehículos y establecer topes en la frecuencia de vuelos en temporada alta y aumentarlos en temporada baja. Además de regular los horarios de apertura de los aeropuertos del archipiélago. «Es imprescindible poder incidir en el número de turistas que llegan y en su distribución a lo largo del año», remarcó Aguiló.
Vivienda: un problema urgente
La organización sindical identifica la crisis de la vivienda como el principal problema social de Balears. Reclama limitar el precio del alquiler, declarar las Islas «zona tensionada» y crear un parque público de 40.000 viviendas mediante pisos vacíos, expropiaciones de bancos y grandes tenedores y nueva construcción, financiado en parte con la recaudación del ITS y un incremento del 2 % del presupuesto autonómico destinado a vivienda. García no acaba de ver los «brotes verdes» que perciben los promotores inmobiliarios en la construcción: «en España llegamos a construir más vivienda que Francia y Alemania juntas hasta que estalló la burbuja inmobiliaria con las consecuencias que todos conocemos. Más que de construir, se trata de limitar los precios y hasta que no lo hagamos no revertiremos la situación».
Para García, «el problema es que la vivienda es más un activo financiero para los fondos de inversión y para que las familias ahorren que un derecho de la ciudadanía». CCOO Illes Balears También propone medidas contra desahucios sin alternativa habitacional y el fomento del alquiler social subvencionado y con apoyo de la administración.
El sindicato reclama un estudio objetivo de la capacidad de carga turística de las Islas, teniendo en cuenta recursos naturales y población flotante. Además, aboga por una transformación del modelo laboral para adaptarlo a las nuevas exigencias medioambientales y productivas: medidas de compensación para los fijos discontinuos, reforzar la FP Dual, crear un centro de referencia nacional de formación en Turismo, mejorar el reconocimiento de enfermedades profesionales vinculadas al cambio climático y el fomento del uso del catalán en las empresas.