El objetivo de los trabajos es cambiar la red de alcantarillado y reasfaltar la calzada del tramo que va entre la calle Orient y Sant Antoni Maria Claret. Las obras están contempladas en dos fases, con una duración estimada en tres meses. La primera fase afecta al tramo comprendido entre la rotonda del Cavall y la calle Oriente, y la segunda hasta el cruce de Sant Antoni Maria Claret.
En esta primera fase, que empieza el lunes, el acceso al Camí de Maó por la rotonda del Cavall quedará cortado a la circulación, hasta la calle Orient. Las calles Consolació y Mare Molas solo permitirán el acceso a los vecinos, que deberán entrar y salir por la misma vía, sin acceso al Camí de Maó, mientras que los residentes de la calle Beat Josep Castell Camps podrán salir hacia el Camí de Maó y girar a la derecha en un tramo de circulación que, de manera excepcional, estará habilitado en dirección prohibida hasta la rotonda. Por su parte, la calle Orient de momento no se verá afectada y mantendrá la circulación abierta en ambos sentidos.
Tres años de retraso
La empresa M. Polo S.L., con un presupuesto de 288.672 euros (IVA incluido), será la encargada de ejecutar unas obras que hace más de tres años que están pendientes. El retraso se debe a que el concurso para adjudicar la reforma quedó hasta tres veces desierto, lo que obligó al Ayuntamiento a duplicar el presupuesto con el fin de adaptarse a «los precios de mercado que se han incrementado de forma muy notable».
La obra prevé renovar unos 300 metros de la red de saneamiento y cambiar una cuarentena de acometidas de los vecinos de la calle, para acabar con el mal estado del alcantarillado de este tramo que provoca de forma recurrente atascos que afectan a viviendas particulares.
