El acusado de grabar a decenas de mujeres en el baño de su bar en Palma: «Me he arrepentido»

El responsable de un bar de Palma acusado de grabar a centenares de clientas con una cámara oculta en el cuarto de baño, admite a medias los hechos. En el juicio, en el que afronta una petición de 60 años de cárcel, responde por haber captado imágenes de 26 mujeres, las que fueron identificadas durante la investigación policial. El acusado grabó desde 2016 a 2022 de forma indiscriminada en el aseo. Había camuflado las cámaras en botellas de agua que dejaba colacadas estratégicamente.

El acusado admite solo algunos de los episodios y justifica lo ocurrido en su drogadicción. . Aseguró a preguntas de su defensa que ha pedido perdón a las víctimas que reconoce y que dedica todo su sueldo a indemnizarlas. En el banquillo de los acusados también se sentó su hermano, dueño del bar, como responsable civil por lo ocurrido. Justificó que él nunca supo nada de lo que ocurría y que era una empleada quien se ocupaba de la limpieza del cuarto de baño.

La defensa alega que se vulneró el derecho a la intimidad del acusado durante la investigación. El caso estalló cuando una mujer encontró la cámara en el baño y llevó el dispositivo a la Policía Nacional, que accedió al mismo y descubrió las grabaciones. El abogado Antoni Serra sostiene que los agentes debieron reclamar autorización de un juez para ese acceso. . La Fiscalía lo rechaza porque el acusado habría entregado de forma voluntaria otros dispositivos y colaboró durante un tiempo con la investigación. La magistrada lo resolverá en la sentencia.

Ante el juzgado tendrán que declarar todas las afectadas salvo las menores de edad. El local, situado cerca de la calle Aragón de Palma tenía mucho movimiento, de manera que el número de víctimas total sería mucho más elevado. El acusado, de 44 años de edad, guardaba en su casa discos duros y tarjetas de memoria en los que tenía almacenados horas de imágenes.

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