Según un comunicado emitido por los organizadores, en la madrugada del miércoles Israel habría lanzado una «operación intimidatoria» contra los barcos. El ‘Alma’, uno de los buques principales de la Flotilla, fue rodeado agresivamente por una embarcación de guerra israelí, desactivando las comunicaciones del barco y obligando al capitán a realizar una maniobra brusca para evitar una colisión frontal. Pocos minutos después, otro de los barcos, el ‘Sirius’, fue también acosado y tuvo que ejecutar maniobras similares.
Tensión y guerra psicológica
Lluís de Moner, uno de los dos activistas menorquines que participa en la misión, ha descrito, en declaraciones a ‘Es Diari’, la tensión vivida durante la pasada noche. «A la una han aparecido dos barcos militares y un submarino y han estado asediando a los barcos más grandes de la Flotilla, que tuvieron que hacer alguna maniobra para salvar una colisión», relata. Según el menorquín, este tipo de acciones forman parte de una «guerra psicológica» para desestabilizar emocionalmente a la tripulación y forzar errores que puedan ser usados en su contra.

De Moner señala que la Flotilla se encuentra a unas 110 millas náuticas de la costa de Gaza, por lo que se están preparando para una posible intercepción por parte del ejército de Israel. «Nuestra teoría es que nos quieren poner nerviosos para que cometamos errores cuando nos intercepten, y puedan grabar algo que vendan como resistencia violenta», afirma. Por ello, insiste en que la misión es estrictamente no violenta, aunque teme provocaciones deliberadas por parte de las fuerzas israelíes, incluyendo «insultos, comentarios sexistas u homófobos».
El activista también explica que sospechan que una eventual intercepción podría ocurrir de noche. «A Israel no le gusta que se vean las cosas y las imágenes nocturnas pueden ser más manipulables», asegura. Si no son abordados, el menorquín cree que podrían llegar a las costas de Gaza durante la mañana del jueves para cumplir su objetivo de entregar ayuda humanitaria directamente a la población bloqueada.
La ONU advierte sobre una intercepción ilegal
Por su parte, la relatora especial de Naciones Unidas sobre la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos, Francesca Albanese, ha advertido este miércoles que, si Israel intercepta a la flotilla humanitaria, «estaría cometiendo una violación de la legalidad internacional». «Si la flotilla es interceptada, esto no sería solo un acto de intimidación y de represión, sino también una intercepción ilegal, porque las aguas de Gaza no están bajo la soberanía legal israelí», ha señalado.
Mientras tanto, el buque de guerra español ‘Furor’, que ha sido enviado por el Gobierno para asistir a la Flotilla, se mantiene fuera de la zona de exclusión establecida por el ejército israelí, pero en alerta por si debe para realizar operaciones de rescate.